Este 7 de febrero llega a Netflix la esperada adaptación a la televisión de la novela gráfica Locke & Key.

Este proyecto viene a ser la culminación de varios intentos por llevar a esta entretenida historia a la pantalla chica desde hace varios años.

El cómic que inspira la serie es una cooperación donde la historia del escritor Joe Hill se complementó con las ilustraciones por parte del talentoso artista chileno Gabriel Rodríguez.

En Canalfreak vimos la serie y te contamos lo que nos pareció.


Sinopsis

Tras el asesinato de su padre, tres hermanos se mudan con su madre al hogar donde él creció: una mansión repleta de llaves mágicas que guardan poderes y secretos.

Protagonistas:   Darby Stanchfield,Connor Jessup,Emilia Jones

Reseña

Para muchos de los que leímos la novela gráfica, la historia de Locke & Key desde siempre pintaba ser buen material para una producción audiovisual. Y fueron varios los intentos de adaptar el cómic al formato, pasando en un inicio por Fox, posteriormente un intento de trilogía de películas, luego Hulu y finalmente Netflix.

Tal vez el tiempo no era el correcto, pero lo que sí tenemos claro, es que al fin los fanáticos de esta novela gráfica podrán ver a sus personajes interpretados por actores de carne y hueso.

La serie cuenta la historia de una familia de tres hermanos que tras el asesinato de su padre, se mudan a una antigua mansión familiar. Mientras se adaptan a su nueva vida los niños y adolescentes, van descubriendo aspectos sobrenaturales que se relacionan a la casa y su historia. En ese contexto es que descubren llaves que poseen un poder mágico y características especiales en cada una de ellas. A la par van conociendo personas que fueron parte de la juventud del padre fallecido,  como ex compañeros de escuela que parece esconden aspectos de esos años. Así mismo el hermano de su padre extrañamente no recuerda mucho de sus años de juventud ni las llaves.

La serie en su inicio se toma su tiempo para presentarnos el universo en el cual se desarrollará, para algunas personas puede ser un poco lenta al principio, pero se hace necesario para poder desarrollar la historia posteriormente de forma coherente. Si bien es cierto se hicieron algunos cambios dentro de la historia, estos van de acuerdo con el proceso de adaptación propiamente tal. Llevar una novela gráfica a la pantalla chica, implica algunos cambios que por el formato se hacen necesarios. Pero estos cambios me parecen bastante buenos e interesantes para la trama y fueron hechos en un trabajo en conjunto con Joe Hill lo que hace que no se sientan forzados en la historia.

Creo que el gran plus que tiene esta serie es su belleza visual, el cómic se caracteriza por tener una casa que pasa a ser un personaje más dentro de la historia, en este caso ocurre algo similar. La casa tiene un diseño y características muy específicas y en esta adaptación logran el ambiente y el espíritu de ella, incluso algunos ángulos de cámara podría decirse que son calcados a los dibujos en los cuales se inspiran. En este caso trabajo de Gabriel Rodríguez en la novela gráfica es un lujo y los productores de la serie aprovecharon esto de muy buena manera.

Grabada en Canadá, fue el mismo productor ejecutivo de la serie Carlton Cuse (Lost, Bates Motel) quien nos contó que para la realización de la serie, la fachada de la casa fue construida desde cero, descartando el uso de una casa existente, para que tuviera la coherencia y el impacto necesario. Detalle que considero notable. Misma delicadeza se puso en la confección de cada llave y en el diseño de cada aspecto de la serie, logrando un resultado que me gustó particularmente.

El elenco, por otro lado, está bastante bien escogido, si bien es cierto en algunos detalles los actores no son 100% iguales en algunos aspectos a los del cómic, logra interpretar la esencia del personaje y les imprime un sello particular. Los hermanos Locke y su madre, por ejemplo, muestran que una química que los hace sentir  reales como familia, por lo que transmiten sensaciones por así decirlo con una vibra similar a la novela gráfica.

Otro especto que me gustó mucho, es la música que termina de cerrar el ambiente y en algunos momentos considero que es el broche de oro para que todo encaje en su lugar.

Realmente la historia, con los cambios que presenta para poder refrescarla y adecuar la historia a tiempos actuales me parecen adecuados. En mi perspectiva son un plus para lograr un buen enganche para el público en la serie, lo que también podría atraer a nuevos lectores a las novelas gráficas.

Siempre existirán fanáticos que querrán apegarse más a la novela gráfica, pero eso es un tema de gustos. Con narrativas y dinámicas diferentes, ambos productos tienen su encanto, su público y se pueden disfrutar de igual manera.

Sólo les puedo decir que dentro de la serie también existen otros regalitos o guiños para los fans del género y los cómic, que no especificaré para no dar Spoilers y que cada cual disfrute la experiencia. Si no conocen la historia, déle una oportunidad, les sorprenderá.

En resumen, una historia que queda como anillo al dedo a Netflix y su formato. Pudiendo verse a capítulos en forma pausada o en maratón al igual que según gustos puede leerse un buen libro. Me gustó mucho el resultado y espero pronto tengamos novedades de una segunda temporada, pues considero que la historia da para explorar mucho más.

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