Bienvenidos a un mundo fuera del tiempo

SinopsisNámanor es un reino mágico, una civilización repleta de optimismo y majestuosidad encapsulada en medio del tiempo. Este paraíso pondrá a prueba su gente, disolviéndolos con un fuego nacido de la apm4xw4v9jambición. Sin embargo, en el horizonte despertará una sombra para cambiar el curso de la historia, un poderoso y ancestral ser que se codea con las montañas.
Aldo A. Berríos construye un universo fantástico que exige un lector valiente, dispuesto a acompañarlo en una aventura tejida por invenciones prodigiosas, profecías, fenómenos de diversa índole y alteraciones de nuestro sentido del tiempo. Tras la última página, aguarda el premio reservado a quienes conquistan el verdadero oro de los mitos: la madurez de la propia conciencia.

 

Reseña: Námanor es una ciudad reloj. Es de forma circular, y está compuesta por 6 castillos, cada uno gobernado por un Almena. La ciudad está rodeada por una pared gigante y tiene dos caballos metálicos que la recorren, los cuales vendrían siendo como las manecillas del reloj (Filira representa las horas y Felgre, los minutos). Esta ciudad se divide en clases sociales: serratos, tendinos y esplenios. Todo esto se nos explica en el prólogo y es importante aprendérselo para seguir la historia sin problemas. Aunque por cualquier duda de donde se encuentra cada cosa, al final del libro vienen dos mapas. Uno de Námanor  y el otro del Tárpan, la tierra más allá de los muros.

El libro se divide en 10 capítulos. Es todo bien ordenado al principio, se nos presentan los personajes, se nos describen el lugar y bueno, yo no tenía idea de a qué nos llevaba todo esto, pero como no era aburrido continuaba leyendo.

Llegamos a un punto donde nuestros protagonistas se separan y ahí ya todo se vuelve raro. Lo que sucede es que Tiamat, Absalón y Hector están en Lineón, ellos deben llegar a Zanalea, no sabemos por qué, pero sabemos que es importante. Tiamat decide recorrer Sirendas  y Oximor, mientras que Héctor con Absalón recorrerán Eumara  y Atenor, para luego todos reencontrarse en Zanalea. Durante este viaje hay muertes y perversión. Se crean alianzas, y la historia comienza desordenarse y volverse extraña. Los personajes cambian y descubrimos varias cosas que nos hacen ver que este mundo no es tan perfecto como creímos y que una guerra se acerca.

Llegando a Zanalea  la cosa se pone peor, ahí se nos cuenta la verdad de todo. Se nos cambia radicalmente nuestro modo de ver a los personajes. Además se juega mucho con la relatividad del tiempo.

Lo otro que me gustó del libro es que tenemos la posibilidad de explorar más allá del muro. Logramos entender el porqué de la portada. Además, aunque todo se veía negro y pensamos que no llegaríamos a nada, logra explicarnos en pocas páginas el motivo de todo lo sucedido y terminas con la satisfacción de haber entendido para donde iba la historia. Por lo menos yo quedé contenta con el final.

Es un libro entretenido y distinto. Nos presenta un mundo novedoso, hermoso y peligroso. Con mucha acción y muertes. Para mí no fue rápido de leer pues sentía que jugaba con mi mente y me estresaba no entender que estaba pasando. Pero es cortito, tiene 170 páginas.

Completamente recomendado para los que desean conocer un mundo nuevo lleno de piedras preciosas.

Para los que les gusta investigar. Les dejo como modo de recreación que busquen el significado de los términos como Almena, Tiamat o Filira, ya que tienen relación con la mitología. Para que vean que tanto nombre extraño tienen una explicación.

Además como dato, Aldo Berríos es chileno. Así que estoy bastante orgullosa de que los escritores nacionales al fin hayan dejado de temer a las novelas de fantasía y estén escribiendo buenas historias, como lo es Námanor.

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