Heart of darkness

El regreso de Galvatron no podía ser con buenas noticias de por medio; después de regresar a la vida, el guerrero restaura las energías de Scourge y Cyclonus, forma una armada y de inmediato se embarca en un viaje de búsqueda a través del espacio.

Este viaje los lleva a Gorlam prime, mundo otrora pináculo de la evolución tecnológica y que ahora está desierto. Galvatron indica que la resolución de todas sus dudas se encuentra allí, pues ha detectado unas cavernas con una gran cantidad de energía; en medio de la búsqueda encuentran a un Jihaxus moribundo, quien luego de ser restaurado, indica que fue atacado por Arcee, quien perfeccionó la técnica de herirlo sin matarlo como venganza. También ayuda a Galvatron a saber que la razón por la que ese lugar es importante es por una concentración de energía de la misma frecuencia que otra que ya conocían.

Decidido a destruir esa fuente, el líder está dispuesto a terminar con todo, pero es interrumpido por Arcee y Hardhead; mientras sus seguidores lidian con ese conflicto, él se interna en la esfera, donde descubre que en realidad se trata de otro tipo de energía negativa, la que absorbió a toda la población del planeta para tener lo necesario, con el objetivo de llegar a este universo y dominarlo.

Justo como el corazón de la oscuridad cuando Nova prime aún vivía.

En tanto, Arcee y Hardhead son superados y ella se ve obligada a huir con un mensaje de extrema importancia: ha escuchado que Galvatron quiere destruir todo.

Spotlight Prowl

La guerra ha terminado, pero las consecuencias no; Prowl es un matemático, pero en esos momentos su participación en el equipo del Optimus está perdiendo fuerza. Insiste en no hacer movimientos, pero el líder reitera que, aunque los humanos los odien, de todos modos ellos deben permanecer alerta para ayudar si es necesario, y también para aprender.

Este pensamiento lo lleva a la infiltración como auto de policía; en un puesto en donde recorre las calles, pero no puede intervenir sobre lo que está viendo, el calculador bot tiene la oportunidad de conocer el micro sistema humano, con sus innumerables errores, su miseria y su corta existencia. Para él, se trata de seres caóticos, cuyos actos están medidos por la desesperación y la baja expectativa de vida, que son inferiores e indefensos.

En los cálculos, sabe que los humanos son insignificantes en comparación con una raza avanzada como ellos, pero de todos modos comienza a experimentar algunas sensaciones que le son extrañas; conforme pasan las semanas y los meses, ve las acciones de los policías y la forma en que luchan por lo que es correcto, salvando cada esquina, y eso lo hace sentirse identificado, comprender un poco más del funcionamiento de esta raza de seres de carne y sangre.

Cuando un accidente pone en riesgo la vida de unas personas, esa variable de caos activa en Prowl algo parecido al instinto de rescate, y lo lleva a salvarlos incluso a costa de exponer su presencia y ser lastimado. Las cuentas no son perfectas, y eso puede influir en futuro.

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Nos leemos en pocos días en el siguiente capítulo: The last stand of wreckers

 

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